La niña Celia está triste. Lamenta que su gato Gazpacho no puede hacerle un regalo. Porque, aunque Gazpacho tenga un regalo, no tiene manos para dárselo.
Este microcuento real me lo contó su madre en 2007.
En la foto, Botón, el gato tuerto y buena gente adoptado por unas amigas.
Olg
botoncete!!!!!!