Bratislava está a 67 kilómetros de Viena siguiendo la ruta del Danubio.
Seguimos el camino por la orilla sur del río hasta llegar a Komárom. Cruzando el puente visitamos Komárno. Esto pasa durante una larga parte del trayecto: en la orilla norte estás en Eslovaquia y en la sur estás en Hungría.
Te haces un poco lío de nombres… estas dos ciudades realmente fueron una hasta la I Guerra Mundial. Aquí veis una torre de cuento.
En esta foto posamos con “Juan”, un señor esloveno que se hace la ruta por segunda vez. Su trabajo le pega mucho: en su ciudad, él es responsable de la movilidad ciclista.
Seguimos el camino. Esta es la basílica de Esztergom. Fijaos en la cúpula. Hay unos puntitos en la base, ¿verdad? ¡Ahí me subí yo! 😀
Subí toda flipada pensando que era gratis, ya que no vi taquilla alguna, y resulta que ¡justo arriba del todo! -después de subir unos cuantos cientos de escalones- hay una señora cobrando la entrada.
Bueno… los florines merecieron la pena!!!
Desde allí al fondo vinimos…
Por aquí seguiremos…
Hasta allá el fondo y más allá!!
Continuando el camino, nos recomiendan seguir por la orilla norte y eso hacemos. Cruzamos en barca y la tarde nos deja esta imagen del río.
Nos quedamos a pasar la noche en Nagymaros, con nuestra tienda de campaña orientada con vistas al castillo de Visegrád.
Por cierto… menudo diluvio nos cayó esa noche…
Un detalle divertido del camino… ¡un paso de cebras!
Y un cartel también muy gracioso 🙂
¡Hay más fotos! ¡Y dibujos! ¡Y dos vídeos! XDDD
Sonia
Ooooohhh, ¡me ha encantado el paso de peatones!!!