Me encantaba el teatro. Lo hice cuatro años durante el colegio y uno en el instituto. Debía notárseme bien que me gustaba porque mis padres decidieron que ya era hora de hablar conmigo. Mi padre me soltó un discurso sobre las salidas profesionales y la angustiosa vida del artista. Todavía me estoy riendo.
Supongo que estaban tan preocupados en anticiparse, que se anticiparon demasiado:
– Pá -le dije- si yo no quiero ser actriz. Ni siquiera valgo para eso. Sólo voy a un taller del colegio, me cojo un papel secundario y nos reímos bien cuando ensayamos.
Javi-Siken
Pues ya podían haberte advertido sobre las salidas profesionales y la angustiosa vida del perio-artista
Miguel
O simplemente sobre la angustiosa vida….
Anonymous
(Soy Eva)
Jajaja no sabía yo de ese discurso.