Maravilloso lo que ocurre en El País. Usted ve este titular, con todo su aspecto de noticia y quizá pincha esperando información sobre la decisión judicial
y ¡tachán! se encuentra usted con la opinión de un señor que probablemente no sólo no le interese, sino que le indigne.
Desde luego, soy la primera que no se cree nada que se pueda diferenciar tanto la opinión de la información. Pienso que de una u otra manera siempre manipulamos e influioms en el resto con nuestras palabras, con o sin intención consciente de hacerlo.
Pero aquí se han pasado mucho. Yo quiero leer unas líneas sobre la decisión de un juzgado y me encuentro con un artículo de opinión. Eso es trampa.
Elena
Estoy de acuerdo contigo en que toda selección conlleva cierto grado de manipulación. Pero esto es ya otra cosa…si quieres meter opinión tal cual, qué menos que una diferenciación tipográfica en el titular… es de ley, de cajón y de manual de toda la vida…