Arte polisensorial… para todos

El viernes estuve en la I Bienal de Arte Contemporáneo de la Fundación ONCE. Puedes recorrer la exposición con cuatro de los cinco sentidos. Además, si quieres, puedes vivir la experiencia como una persona ciega (te prestan un antifaz y un bastón), como una sorda (con unos auriculares aislantes) o desde la altura de una una silla de ruedas.

Tacto.- Esto que véis aquí es un jardín de cristal sobre carbón. Me llamó la atención la variedad de materiales que utiliza el arte polisensorial, destacando el uso de piedras y de elementos con diferentes temperaturas.

Oído.- Esta obra se llama “cuadro sonoro robado”. Es un cuadro en blanco con un altavoz en el centro. La voz grabada de una mujer te describe en 32 segundos la escena representada en él.

Según la organización,

De esta forma, el que ve, aprende a tocar, el que no ve, disfruta imaginando sobre la base de sus percepciones y la comunicación de la obra por otros, el que no oye, disfruta de la vibración como base del sonido, el que no puede tocar, disfruta transmitiendo lo queve, y todos se hacen necesarios a los otros, se hace gratificante compartir el arte, convirtiéndose en objeto de disfrute compartido.

Olfato.- Aquí se puede tocar todo… e incluso tienes que olerlo.

Vista.- Esta obra es un poco abrumadora. Se trata de una composición con un montón de máscaras de cera que la autora (¿o autor?) se hizo sobre su propia cara en momentos angustiosos. Es decir, cuando tocas la escultura, estás tocando su rostro… y su dolor.

ÿste es parte del Arrow proyect. Es una de la más divertidas, junto a los tubos que suenan cuando pasas al lado. Y quizás de las que tienen además mayores aplicaciones.

Puedes mover el ratón fuera de la pantalla y hacer clics en los objetos de la mesa. Si pulsas en el reloj, aparece un aviso para que papá no se olvide de recoger a los niños. Si pinchas en la revista, aparece su web. Cuando pinchas en el flexo, se apaga o se enciende.

ÿste es el pequeño misterio de la exposición. Tienes que asomarte al agujero para verlo porque es imposible echarle una foto.

La exposición además está en una sala grandiosa del Círculo de Bellas Artes, del que ya os he dejado alguna fotografía más por aquí.

La verdad es que siempre me he preguntado por qué en el Arte se prima sobre todo el sentido de la vista. Anque anteriormente, hace siglos, sí que había estado en una exposición de olores que se llamaba “Los aromas de Al-Andalus”.

También me pregunto si se pueden digitalizar y transmitir las percepciones que recibimos por los otros sentidos… por ejemplo por Internet.

Normalmente, se transmite el sonido (oído) y la imagen (vista). Hemos visto algo de transmisión táctil con algunos videojuegos y el primer post táctil de la historia… ¿pero se puede o se podrá oler o saborear?